Realmente no se que nos paso, como es que llegamos a todo esto, al inicio te sentí con mucha ilusión, con muchas ganas, ¿hice algo mal? Si, acepto que en ocasiones no fui la mejor, conversamos al respecto y te hice una promesa, te demostré lo que querías, pero para ese momento ya era tarde, habías cambiado mucho, te sentía diferente, distante, indiferente y yo por dentro me preguntaba el motivo de mi error, me preguntaba si merecía una oportunidad, me preguntaba que pasaba, en que falle o en que fallamos, ahora es más difícil todo, tu ya no me quieres (si es que en verdad me quisiste), ya no me extrañas y solo piensas que lo mío fue una obsesión, ¿sabes? No se llama obsesión, se llaman sentimientos solo que a mí me da por emocionarme muy rápido, mi romanticismo es muy elevado y suelo querer a alguien con tanta facilidad que termino por llevar la peor parte, termino por maltratarme inconscientemente y desprender todo de mi ser para entregárselo a quien esté a mi lado, a veces no quisiera escribir poemas porque siento que de nada sirven, a veces desearía renunciar a un escrito por un amor verdadero, pero eso va contra mi voluntad, es irónico, si no escribo es porque no siento nada y si escribo mucho es porque tengo el alma enamorada y en ocasiones como esta, destrozada, para mí un poema es como una catarsis, me relaja de todo y me siento liberada, si renuncio a ellos renuncio a mis sentimientos y para querer a alguien los necesito, en este caso estabas tú, lo que me hacías sentir lo reflejaba en cada palabra y en cada frase, ahora ya no estás, pero así como es fácil acostumbrarme, se me hace difícil olvidar, me cuesta pero nada es imposible, lo sé.
En todo caso, guardo los buenos momentos y los no tan buenos (por no decir malos) trato de recordarlos para no volverlos a cometer, me gustó cuando vi tu sonrisa por primera vez, tus ojitos soñadores y dormidos, tu fuerza y tu forma de demostrarme algo que francamente no me hubiese importado si es que en ese momento no lo arreglabas, (si hablo de la escena cuando nos conocimos, cuando no dejaste que yo me fuera con el pensamiento equivocado), me encanto tu manera de ser al principio, sin temores ni prejuicios, ahora, solo espero recuperar mi poemario porque creo que a ti ya te perdí sin haberte tenido, estaba en la creación de uno nuevo solo para ti, escribiendo todo lo que provocabas con un simple “mi amor”, pero ya no sirve de nada, solo espero que conserves los escritos que te di y que riegues esas rosas para que no se mueran de pena, ojala superes tus temores y no abandones a la persona de la cual te enamores, no sé como terminar, se me hace difícil hacerlo, quizá te vuelva a ver (ojala) pero esta carta no podre entregártela personalmente, así como la que conservo y que jamás pudiste ver, así la conservo para algún día entregártela y sepas realmente lo que sentí por ti.
Cuídate mucho, al principio pensaba en protegerte y estar siempre a tu lado pero la promesa que me hice no podre cumplirla por completo… porque ya no estoy a tu lado pero si quiero protegerte, no sé cómo pero hare lo que esté a mi alcance. Cuídate mucho, si necesitas algo, házmelo saber, gracias por todo, por tu tiempo y por haberme permitido entrar aun que sea por un momento, si el destino nos hizo encontrar por algo será, mis mejores deseos para ti, hasta pronto… ¡gracias otra vez!
Pd: no descuides tu salud y date un tiempo para ti… te extraño, ya no te molestare mas, por que esta es la ultima carta...
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